En lugar de entrenar un ejército en los últimos cien años, la iglesia ha
entretenido a un montón de bebés retardados espiritualmente. Como el
evangelio no cuesta, la gente cree que el reino de Dios también es
gratis, que Dios nos pedirá algún sacrificio siempre y cuando no se
alteren nuestros gastos fijos. Pero el verdadero evangelio exige un alto
precio; es incómodo para la carne, ofende la mente, revela el corazón
del hombre. El verdadero evangelio te va a generar conflictos
familiares, te va a confrontar con el pecado, te llenará de crisis y te
hará sentir en deuda.
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http://depositfiles.com/files/5sge7967u
viernes, 14 de diciembre de 2012
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