Habrás visto en las cortes judiciales que alguien pone la mano en la
Biblia, levanta la derecha y jura decir: “La verdad, toda la verdad y
nada más que la verdad”. Es un testigo. No puede ampliar, inflar, ni
diluir la verdad. Tiene que dejar que los abogados peleen; que el juez
la interprete. Pero como testigo no puedes contaminar el resultado. Los
cristianos también somos testigos, llamados a decir SOLO la verdad…pero
la mayoría mentimos.
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http://depositfiles.com/files/k1ja4pa7h
lunes, 10 de diciembre de 2012
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